Es la actuación integrada de un gran número de mecanismos heterogéneos de defensa contra sustancias y agentes extraños. En general, a las sustancias extrañas se las denomina antígenos, y son ellos los que desencadenan en el organismo una serie de eventos celulares que provocan la producción de los mecanismos de defensa. Como veremos, los mecanismos de respuesta tienen un componente celular y otro molecular.
3.3.1.- Mecanismo de la respuesta inmunitaria
La activación de la respuesta inmune, - natural o adquirida-, se produce por una serie de mecanismos que, de forma coordinada, activan diferentes poblaciones celulares y la secreción de diferentes moléculas, con la finalidad de eliminar el agente extraño. Estos mecanismos de defensa son barreras físicas y químicas (piel, secreciones, enzimas...). Hay dos tipos de respuesta:
- Respuesta natural o innata (inmune no específica):Se produce mediante la activación de las células NK, por fagotitosis, citosinas o complementos de vía alternativa.
- Respuesta adquirida (inmune específica): Influyen factores humorales y celulares. Se produce mediante anticuerpos, citocinas, complementos de vía clásica o por citoxicidad.
3.3.2.- Memoria inmunitaria e inmunidad
La primera vez que una persona se expone a un agente infeccioso existe un lapso de varios días antes de que se aprecie un aumento de anticuerpos y linfocitos. Durante años el sistema inmunitario recuerda a ese germen y si se encuentra de nuevo con él, reacciona de forma mucho más rápida e intensa. Esto se conoce como memoria inmunitaria. Gracias a la capacidad de memoria del sistema inmunitario, es posible:
- La recuperación de muchas enfermedades.
- La proporción de una inmunidad natural contra esas enfermedades.
- La protección frente a enfermedades graves mediante la inmunidad.
Por ello, la inmunidad es el conjunto de mecanismos de defensa frente a agentes externos extraños .